María: | Noé, ¿cuál es tu comida favorita cuando vas a la playa? |
Noé: | ¡Qué buena pregunta, María! Yo personalmente pienso que, cuando uno está en la playa, cualquier platillo es bienvenido. Nadar en el mar siempre me da hambre, no lo puedo evitar. Pero si tengo que elegir, optaría por unos aros de calamar fritos. O me comería una torta como tantas veces lo hice en mi infancia. |
María: | Para mí no existe nada más veraniego que comer un durazno mirando al mar. |
Noé: | ¡Sí! Un durazno bien dulce, con algún granito de arena que nos sorprende al morderlo. |