Marta: | Ayer dormí una siesta de más de una hora. Oye, por cierto, ¿sabías que en un pueblo de Valencia, en España, hicieron una ley para regular la siesta? |
Luis: | ¿Si no duermes la siesta en ese pueblo, te pueden meter en la cárcel? |
Marta: | Bueno, no exactamente… Desde el verano de 2015, en Ardor, ese pueblo de Valencia que te digo, durmieron la siesta por ley porque así lo disponía la orden municipal que el alcalde dispuso. |
Luis: | Ya entiendo lo qué pasaba. Al alcalde le faltaba un tornillo o le gustaba dormir la siesta y así durmió sus siestas de verano sin sentirse culpable. Hizo una ley que a él le convenía. |
Marta: | No seas malo, ya sé que en política esto pasa muy a menudo. Pero, en este caso, que el pueblo duerma la siesta por ley tiene una explicación. El objetivo era que la gente del pueblo durmiera la siesta entre las dos y las cinco de la tarde debido a la ola de calor que arrasó la Península Ibérica. |