Marta: | En Madrid ha empezado una nueva tendencia de diversión . Hay un lugar sagrado para divertirse bailando. ¡El periodista que contó la experiencia en un artículo que leí, se divirtió como nunca! |
David: | ¿Sagrado? ¡Todos los jóvenes nos hemos divertido bailando! Los de mi generación nos divertimos con la música electrónica de las discotecas. Las discotecas eran lugares sagrados para nosotros… En la época de mis padres, el baile de los domingos por la tarde también era sagrado. Música lenta, bailes agarrados... |
Marta: | Y en los 80, la gente se divirtió mucho en las discotecas con la música disco. ¡Ir a la disco se convirtió en un ritual! Yo en los 90 iba más a los clubs de salsa. Durante unos años seguí todas las salas de baile de música latina de Barcelona. |
David: | Lo importante es bailar, mover el esqueleto y conectar con la gente. ¿En qué se diferencia ese nuevo “lugar sagrado” que has mencionado a otros de otras épocas? |