Manipulación genética y delirios de grandeza
30 January 2019
Las técnicas de edición genética existen desde hace décadas, y se han usado para alterar muchas de las frutas y verduras que consumimos: maíz, soja, tomates, piña, canola… La lista de alimentos transgénicos es tan larga que quizá resultaría más fácil inventariar los productos que todavía no han sido alterados.Inicialmente, estas técnicas eran caras y, sobre todo, poco precisas, lo cual dificultaba su aplicación en seres humanos. Pero, en la última década, las cosas han cambiado radicalmente. La comunidad científica ha descubierto cómo transformar el denominado sistema CRISPR —que, en la naturaleza, forma parte del sistema inmunológico de las bacterias— en una herramienta de edición genética enormemente precisa y efectiva.