Turismo, pero no a cualquier precio
2 May 2018
Muchos utilizamos plataformas “online” de alquiler vacacional, como Airbnb. Con frecuencia sale más barato que quedarse en un hotel. O, por el mismo precio, uno puede alojarse en una habitación mucho más agradable, o incluso alquilar un apartamento entero. Además, los anfitriones casi siempre son gente maja, y sus recomendaciones suelen ser más personales y mejores que las de los hoteles.Sin embargo, estos servicios tienen un lado oscuro que no puede ignorarse. Cuando el volumen de alquileres turísticos sobrepasa un cierto nivel, de manera inevitable comienza a afectar a la convivencia social