China convirtió los arrecifes, que solían estar sumergidos, en islas mediante un enorme proyecto de construcción, que comenzó a finales de 2013. China reclama la mayor parte de los mares del Sur y del Este de China, pero otros países del sudeste asiáticotambién han reclamado el archipiélago Spratly y otras islas, ya que se cree que tienenaguas ricas en recursos a su alrededor.