El golpe de Estado militar en Myanmar pone en peligro el proceso democrático
El 1 de febrero, el ejército de Myanmar se hizo con el poder mediante un golpe de Estado, justo antes de que el recién elegido Parlamento jurase el cargo. El ejército impuso el estado de alarma y detuvo a la consejera de Estado Aung San Suu Kyi.
Como muchos golpes de Estado, éste fue justificado en nombre de la democracia. En las elecciones del 8 de noviembre, el partido Liga Nacional por la Democracia, de Aung San Suu Kyi, obtuvo una aplastante victoria sobre el Partido Unión, Solidaridad y Desarrollo, que apoyaba al ejército.
Las declaraciones posteriores al golpe de Estado fueron similares a