El gran misterio de la culpa
15 November 2017
Recuerdo la noticia como si fuera ayer. Y creo que la mitad del país también la recuerda. Doce años atrás, tres chavales de la clase alta catalana irrumpían de madrugada en una oficina bancaria, rociaban con gasolina a una mujer indigente, y acto seguido le prendían fuego. La mujer moría dos días después a causa de las quemaduras. Las imágenes grabadas eran sencillamente espeluznantes. Durante el juicio que se celebró poco después, observando el rostro de Ricard Pinilla, aquel joven de 18 años recién cumplidos y líder de la pandilla, recuerdo haber pensado: si ese chico fuera hijo mío, cortarí