El domingo Indonesia ejecutó a seis personas, un ciudadano local y cinco extranjerosprocedentes de Brasil, Holanda, Malaui, Vietnam y Nigeria. Los hombres, acusados de narcotráfico, fueron fusilados por un pelotón en una prisión de alta seguridad. Tanto Brasil como Holanda expresaron su indignación frente a los fusilamientos. Dilma Rousseff, la presidenta de Brasil, dij