Jorge: | La ciudad de Nueva York debe ser el lugar con más diversidad del mundo, ¿no crees? Allí puedes encontrar a un niño de cinco años con un teléfono móvil de 500 dólares, o gente manejando coches de medio millón de dólares. Gente predicando en las calles, contándote las historia de su vida, y otros que, en cambio, son una tumba... |
María: | Sí, es una ciudad donde puede pasar cualquier cosa, pero pensé que con diversidad te ibas a referir a nacionalidades y etnias. Estados Unidos es un país de inmigrantes, un “crisol de razas”, y ninguna ciudad americana representa esa idea mejor que Nueva York. Piensa en los jóvenes que a los quince años partían de Europa en barco y viajaban por muchos días hasta llegar a la isla Ellis... |
Jorge: | ¡Sí, a eso quería llegar! La migración hacia Nueva York nunca se ha detenido. Están los jóvenes estadounidenses que con 18 años se van a estudiar a la Gran Ciudad, o a perseguir un sueño; están los que llegaron de diferentes partes del mundo en los años setenta, en los noventa; pero... ¿y los mexicanos? |