El mítico salón Los Ángeles, al borde del cierre

Los salones de baile son una institución en México. Muchos de ellos nacieron a mediados del siglo pasado y se convirtieron en un punto de encuentro de la sociedad. Sobre sus tablas danzaban tanto la élite mexicana de la época como gente procedente de los barrios más populares. No importaba la extracción social. Sólo el ritmo. Daba igual que sonara un mambo, un danzón, una ranchera o un chachachá. Lo único que había que hacer era bailar con desenfreno.

Con el paso de los años, la llegada de nuevas modas abocó al cierre a muchos de estos entrañables salones. Pero algunos lograron resistir. Uno de