El poder ciudadano: entre la subestimación y las enormes posibilidades de cambio
8 February 2017
En casi todas partes la manifestación ciudadana tiene una larga historia de represión, o improductividad, y son pocas las personas que tienen fe en esta forma de protesta. Es por eso que, a mi parecer, lo ocurrido durante estos días en Rumania es un ejemplo para todos. Así, idealmente, las protestas trascienden los problemas locales y se convierten en un mensaje de optimismo para todo el mundo.El martes 31 de enero comenzaron las protestas en las principales ciudades de Rumania, aunque la mayor concentración se dio en la Plaza Victoria, de Bucarest. Todo comenzó cuando el Gobierno del Partido Socialdemócrata (PSD) pasó un decreto para despenalizar algunos casos de corrupción. Entre ellos se cuenta la eliminación de penas de cárcel para los corruptos que hubieran robado o recibido sumas inferiores a 200,000 lei (44 mil euros).