19 April 2017
Desde niña he escuchado infinidad de veces que la democracia es el mejor sistema de gobierno inventado por la humanidad. Y ahora… no es mi intención desmentir esta afirmación, pero está visto que, en la práctica, este mecanismo de expresión política presenta muchos inconvenientes. Y es que la voz de la mayoría no siempre es confiable. La mayoría puede ser manipulable e ignorante; la mayoría puede ser prejuiciosa, egoísta, intolerable, de poca perspectiva e incluso, si queremos ir más lejos, la mayoría podría parecer estúpida. Así pues, aparecen líderes populares que convocan lo peor de la mayoría y, en nombre del sistema democrático, acaban con este. Esto es, líderes que son más importantes que sus programas; líderes carismáticos y guerreristas que encarnan la figura del héroe mesiánico.